jueves, agosto 18, 2016


IntensaMente

Y ¿Qué hace la Tristeza aquí?


“Alegría inmediatamente sintió un gran amor por Riley y se comprometió a hacer todo lo que estuviera en sus manos para que tuviera una vida muy feliz. Incluso pensó que sólo serían ella y Riley para siempre… Pero treinta y tres segundos después de que Riley nació, alguien más se materializó en la consola y comenzó a trabajar en el control de mando. Riley comenzó a llorar.
-Soy Tristeza –le dijo a Alegría la nueva y azul integrante, presentándose a sí misma de manera sombría”
“Intensa Mente: La novela” (Diney/Pixar, 2015)


El año pasado, con motivo del estreno de la película de Disney/Pixar “Intensa-Mente”, un periodista me preguntaba mi opinión como psi sobre la trama llegando a formular de inicio algo como “Y ¿Es así como en la película como funciona nuestro cerebro?” Irónicamente reflexionamos ¿Está preguntando realmente si “dentro” de nuestro cerebro hay criaturitas de colores moviendo los controles de una consola? La pregunta es prueba de lo complicado de hablar de una película que bien podría incluirse en esas odiosas listas que hay en la red sobre las “20 películas que todo psicólogo debe ver” (si no un título peor como “20 películas inspiradas en la obra de Sigmund Freud”). La complicación es que el tema “Psi” (el cerebro, la mente) invita a una psicologización del arte popular donde se termina evaluando con la pericia del experto una experiencia lúdica.

Bien podría considerar nuestro lector recién llegado a este blog, que el escribe justamente invita a esa psicologización al poner en relación el psicoanálisis y el cine popular. Sin embargo, el intento constante de nuestras publicaciones es sugerir que en dicha relación, se empiece por reconocer el saber de lado del cine popular más que en el psicoanálisis; llegando a proponer, que los creativos del cine pueden enseñar al psicoanálisis nuevas, más ricas e interesantes “categorías” de análisis de la subjetividad.

En el caso de Intensa-Mente, su valor para el psicoanálisis no lo encontramos solamente en el hecho de que el tema sea “en el mundo interno expuesto”, para hacer referencia el título original “Inside-Out”, sino en su carácter de cuento familiar que escenifica una transición presentada desde el saber del arte y el juego.

Desde la obra seminal del psicoanálisis “La interpretación de los sueños”, la importancia de los cuentos de hadas es similar a la de los procesos oníricos y los mitos. En la obra más conocida que aborda el tema, “Psicoanálisis de los cuentos de hadas”, Bruno Bettelheim plantea dos tipos de historias infantiles.

““Para que una historia mantenga de verdad la atención del niño, ha de divertirle y excitar su curiosidad… Pero, para enriquecer su vida, ha de estimular su imaginación, ayudarle a desarrollar su intelecto y a clarificar sus emociones; ha de estar de acuerdo con sus ansiedades y aspiraciones; hacerle reconocer plenamente sus dificultades, al mismo tiempo que le sugiere soluciones a los problemas que le inquietan…El niño necesita que se le dé la oportunidad de comprenderse a sí mismo en este mundo complejo con el que tiene que aprender a enfrentarse, precisamente porque su vida, a menudo, le desconcierta.”. Bettelheim, B. (1999 (1976)). Psicoanálisis de los cuentos de hadas (The Uses of Enchantment: The Meaning and Importance of Fairy Tales). Barcelona, España: Crítica.

Esto mismo podemos reconocerlo en la oferta de películas infantiles. En la primera categoría encontramos las historias que divierten a los pequeños con una serie de viñetas/gags cómicos, muchos de ellos al estilo del pastelazo; por ejemplo “Los Minios” o más reciente “La vida secreta de las mascotas”. En la segunda categoría ubicamos historias que, además de entretener, puede mover al espectador a las emociones que un buen cuenta-cuentos lleva, donde no se elude la dificultad sino que creativamente se le atraviesa, las historias como una travesía.

Emociones en Pixar


Si algo ha distinguido las propuestas de la productora Pixar es que sus historias abordan esos temas que inquietan según Bettelheim. Retomamos una cita de la periodista Jacqueline Waisser, que utilizamos en otro post con el tema de “Toy Story” https://hectormendoza.blogspot.mx/2011/02/toy-story-lecciones-con-juguetes-sobre.html

“Hay algo muy cruel dentro del esponjoso mundo con relleno caramelosito que es Pixar. Sus creaciones detonan sensaciones primitivas que nos remiten a la infancia de golpe, y nos hacen necesitar de vuelta al oso de peluche o añorar el aroma del platillo favorito que preparaba mamá. Y es que crecer es sufrir, y ser niño es la etapa más vulnerable que se pueda vivir.” Waisser, J. “Cuando los dueños se van” Revista Cinemanía Año 14, No. 165.

El tema del crecimiento es lo que dota a muchas de las historias de Pixar el carácter especial de fábula, sin caer en lo grosero de la moraleja de la historia, presenta la dificultad y acerca a la familia a temas difíciles de pérdida y transición. En el caso que nos ocupa la anécdota lo logra al dar voz a las emociones. El guionista y director de la película Pete Docter, responsable de otras películas como “Monsters Inc” y “Up: una aventura de altura”, explica de la siguiente forma de que va “IntensaMente”:

“La historia trata sobre Riley que tiene 11 años, ha crecido en Minessota y su muda a San Francisco, por supuesto con todos esos cambios de nueva escuela y amigos. Pero Riley es realmente el escenario ya que la verdadera historia se lleva a cabo dentro de su mente y los personajes principales son sus emociones: Enojo, Tristeza, Miedo, Asco y por supuesto Alegría. Así, estos chicos son los que pilotean a Riley, se ven a sí mismos como consejeros o padres, de alguna manera, tratan de conducirla a través de toda interacción en la vida y todos tienen ideas muy pasionales sobre la forma correcta de enfrentar todo. Miedo, generalmente implica correr de los problemas o evitarlos; Enojo, generalmente quiere golpear a alguien; Alegría corre a abrazar e intenta cosas nuevas. Realmente se trata de la tensión y la lucha entre los personajes lo que lo hace interesante y creo que son como las voces dentro de nuestra cabeza.” “Inside Out - Behind the Scenes Interview with Pete Docter”  https://www.youtube.com/watch?v=_Ks3BXmRDUM

Cuando me preguntaban sobre donde se ve en la película lo que el psicoanálisis menciona estilo “¿Dónde están el Yo, Ello y Superyó?”  “Cuando van a la cárcel, ¿es ese el inconsciente?” “¿Hay algo de psicoanálisis en todo este mundo que tiene que ver más con el cerebro?” Desde la creación de los artistas me inclino más por la ocurrencia de Docter que reconoce a estas emociones como “las voces dentro de nuestra cabeza”. Si algo aporta a la teoría del psicoanálisis este bello cuento es justamente que nuestra Intensa-Mente habla, además que existe una relación entre el hablar, los recuerdos y las emociones que se transforman en sentimientos, ya sea en lenguaje oral o corporal (sobre lo que hablaremos más adelante). Si habria que buscar un personaje diferente de los principales para habalr del Inconsciente escogeria a los guionistas de los sueños/peliculas. La explicación de Docter que reconoce a los personajes principales en las emociones y Riley el escenario, también nos lleva a ver por qué es mejor nombrarla como historia familiar más que infantil, ya que las emociones funcionan como estos “padres” o “consejeros” que buscan cuidar a su niña. De esta forma, InsideOut le habla tanto a niños como a padres de nuestros tiempos y su cuestionamiento con respecto a la crianza. Sigamos con lo que menciona Docter con respecto a estos personajes principales de las emociones.  

“Quisimos capturar cómo se sienten las emociones, las formas mismas representan ciertas cosas. Por ejemplo Enojo es como un ladrillo, simplemente es sólido y por supuesto se enciende ya que enojarse se siente como su estuvieras en llamas. Miedo es como una vena o un nervio como el doblez de un tipo nervioso. Asco la moldeamos como un brócoli, tanto forma como color. Tristeza es una lágrima al revés. Y Alegría es como una explosión, una estrella. Tiene mucha energía y vitalidad, sin miedo, es quien nos hace ir, tomar todas las oportunidades y riesgos.”

 Esta propuesta creativa de la difícil empresa de capturar en imagen las emociones, se puede apreciar desde los primeros conceptos en la preparación de la película. Es ahí, donde radica una de las mayores aportaciones del arte de la animación a la reflexión sobre la “vida emocional”.

La tarea de los realizadores no solo anima a las emociones sino que, al ilustrarlas y hacerlas personajes, redescubre lo que se habla en esos movimientos que implica la etimología de la emoción convirtiéndolos en sentimientos cuya función radica en el lenguaje en el cuerpo y la trasformación de la angustia. Decimos lenguaje en el cuerpo para también referirnos al lenguaje corporal en lugar del equivoco “no-verbal” cuando se ejemplifica con posturas y gestos. Lo que los animadores muestran con su arte es que siempre hay lenguaje y verbos en esos la presentación de esos cuerpos.


Siguiendo con los ejemplos de Docter, cuando deciden que Enojo es un ladrillo, cuadrado, pesado, sólido, recodamos la frase de “sentarse en su macho” o simplemente el tomar una posición frente a una injusticia. El enojo como una forma de responder donde el cuerpo se solidifica y defiende amurallándose. Enojo no necesariamente es odio, es el primario “No” que fija una posición autónoma. Aún y cuando sabemos que en nuestro país este personaje lo nombraron “Furia”, preferimos el tradicional y más familiar “Enojo” para el término original “Anger” y dejando la nominación de Furia solo al momento cuando el personaje se pierde en su impotencia, explota y se prende de fuego haciendo eco de su “furiosa” etimología. Siguiendo con los personajes, Miedo, como un nervio que se dobla nos recuerda cuando alguien es nervioso (¿neurótico?) y, si llega a temblar, llega al Temor. El cuerpo que tiembla y se tensa remite a la clásica figura de estar atrapado entre dos fuerzas, por un lado, el impulso a seguir y por el otro el detenerse ante la advertencia de ahí que el Miedo es el más cercano a la Angustia. ¿Qué nos enseña que los artistas hayan decidido que  “Asco” remita en su color y forma a un brócoli? Primero una anécdota, según algunas entrevistas, la escena donde la bebé Reily avienta el brócoli como primera comida que generó Asco fue cambiada en varios países asiáticos ya que encontraban que los niños no les parecía asqueroso el brócoli sino que delicioso, lo cual remite al hecho de la relación con las sensaciones corporales, placenteras o asquerosas, están mediadas por el malestar en la cultura. Asco, más corporal que el intelectualizado “desagrado”, nos acerca al clásico descubrimiento freudiano de la etapa oral en su teoría sexual. Eso que entra en por la boca e in-corporamos (que nos da cuerpo) también provoca, como en Miedo, una relación de gusto y disgusto como en el goce del objeto fóbico. Finalmente están las protagonistas de la historia Tristeza y Alegría. La primera, es esa expresión corporal mágica de la lágrima. Como pregunta de robot en película de science fiction ¿Qué provoca las lágrimas? Una expresión en el cuerpo que denota un cierto estado, un sentimiento que produce una reacción que alivia al dejar rodar y caer algo mientras se detiene y toma su tiempo. Alegría, como estrella, energía, explosión, busca moverse y abarcar logrando –como lo que los antiguos psiquiatras llamaron “manía” según lo que sus pacientes les decían- lograr que todo esté conectado y no existiera interrupción, espera o letargo en lo que han emprendido. En nuestra fábula de Pixar, Alegría es la líder de todas las emociones y la que tiene que transformarse en la aventura, revelándose como el sujeto en cuestionamiento. (Más que Reily, la historia de IntensaMente es la de “Alegría” lo cual me lo explico muy claramente mi hijo de 4 años que se refiere a Intensa-Mente como “la película de Alegría”).

“Por qué querrías que tu niño estuviera triste”


Docter relata así la clave de la historia.  

“Riley se muda de Minnesotta a la gran ciudad de San Francisco, lo cual es un gran cambio para ella. Creo que Alegría probablemente hubiera podida manejar  incluso  la tensión con Enojo y Miedo, pero Tristeza empieza a actuar en formas que Alegría no había visto antes. Alegría, de todas las emociones, Tristeza es aquella que no entiende. Sabe que Enojo es la que le ayuda a Riley a obtener lo que quiere, Miedo la protege de ser herida, Asco evita que sea envenenada física o emocionalmente. Pero Tristeza, Alegría no entiende por qué querrías que tu niño estuviera triste. Ahora, Tristeza está actuando más, transformando los recuerdos felices en tristes. Alegría está realmente intrigada, así que esta lucha entre ellas termina con que sean expulsadas del Comando Central a la memoria a largo plazo, lejos de donde puede hacer su trabajo y hacer a Riley feliz. Ahora, sin ellas junto con los recuerdos centrales, todo se apaga. Todo lo que entienden que es su niña, lo que hace Riley Riley, y ahora ella está pagada, anda abatida por la vida de la forma como uno siente mientras va creciendo.”

En la historia de IntensaMente, además del gran cambio en la vida de Reily, el cambio es la actuación de Tristeza. El momento que trastoca la vida de estas emociones es cuando Alegría, al intentar mantener alejada a Tristeza, accidentalmente es expulsada junto con aquella y tienen que empezar un regreso al cuartel general. De cierta forma, lo que Alegría tiene descubrir es la función de Tristeza en el crecimiento de Reily.

En la travesía de regreso, un momento importante es con relación al otro gran personaje de la historia, el amigo imaginario de Reily llamado “Bing Bong”. Al ir recorriendo el mundo de la fantasía de Reily, se dan cuenta que muchas cosas están siendo desechadas como los castillos de princesas y los peluches, entre muchos otros objetos preciados de la infancia de Reily:

“-¡Nooo! ¡No pueden llevarse a mi cohete al basurero! ¡Riley y yo iremos a la Luna! Observó en silencio mientras el cohete desaparecía en la infinita oscuridad del basurero… Alegría… intentó reconfortar a Bing Bong…
-¡Ataaaque de cosquillaaas! –dijo Alegría, probando una nueva estrategia.
Intentó hacerle cosquillas, pero no respondió; incluso intentó hacer caras graciosas, pero sus tonterías no sacaban a Bing Bong de su tristeza…
Tristeza sólo caminaba, hasta que decidió sentarse a un lado de él.
-Siento mucho que se hayan llevado tu cohete –dijo con gentileza-. Se llevaron algo que amabas y ya no lo tendrás… nunca…
Bing Bong puso su cabeza en el hombro de Tristeza y comenzó a llorar lágrimas de dulce. Ella lo abrazó e intentó reconfortarlo mientras él lloraba. Después de una buena sesión de llanto, Bing Bong se secó las lágrimas y respiró profundo. -Ya me siento bien- dijo...
-¿Cómo hiciste eso? –preguntó Alegría
-No lo sé –dijo Tristeza-. Él estaba triste, así que sólo decidí escuchar lo que…" Disney & Docter, P. "Intensa Mente. La Novela" (2015) Editorial Paneta Junior. Págs. 96-98  

La importancia de esta escena es que comienza a hacerse claro para la protagonista Alegría –y para los espectadores que la acompañamos en su travesía- la función de Tristeza y el aprendizaje en la historia. La otra gran escena también involucra al “amigo ideal” (por lo tanto imaginario) Bing Bong. Alegría y Bing Bong están atrapados en el “basurero mental”, un lugar donde ya no se puede regresar y donde se olvida para siempre lo que caiga ahí. Lo bien escrito de esa escena es que el predicamento en el que se encontraba Alegría, no es más que una reproducción de lo que inició la aventura, se reprodujo el error inicial. Alegría cae al basurero en un desesperado intento de volver al cuartel general y, al ver que la presencia de Tristeza afectaba los recuerdos de Reily, rechaza a Tristeza de nuevo abandonándola y trayendo consigo el fatídico desenlace. En el basurero, Alegría se siente desesperanzada y llora, afectado la esfera que contenía el recuerdo de Riley después del juego de la semifinal de hockey.

“Alegría observaba mientras el equipo de hockey rodeaba a Riley en el árbol torcido y de pronto se dio cuenta de algo… Mamá y papá… el equipo… llegaron a ayudar gracias a Tristeza. Alegría volteó a ver a Bing Bong con energía renovada. Sabía lo que tenían que hacer.” Disney & Docter, Op. Cit. Págs 133-134.  
 
¿Qué era esto que ahora sabía Alegría? ¿Qué era lo que tenían que hacer? En las escenas arriba relatadas encontramos la propuesta de la película, la función de la Tristeza, sobre todo en el desarrollo que nos confronta con pérdidas. De esta forma, la idea de la película apunta al tema actual de nuestra relación con las pérdidas y sus duelos, tal como lo aborda el psicoanalista Darian Leader:

“¿Qué pasa con el duelo en estos días de felicidad? Tenemos que estar felices todo el tiempo. Siempre somos empujados a no pensar en nuestras pérdidas, de superar nuestras pérdidas. Nos encontramos con esta idea errónea de que si perdemos a alguien por separación o muerte, debemos reemplazarla o encontrar a alguien más. ¿Cómo puedes reemplazar a alguien que amas? No puedes, sino más bien la pregunta es sobre encontrar una forma de hacer de esa ausencia parte de tu vida, ¿qué puedes hacer con tu pérdida?” Leader, D. (2011). La Moda Negra: Duelo, Melancolía y Depresión. Madrid: Sexto Piso.

Los cambios implican una pérdida y la Tristeza es la encargada, como sentimiento, de darle su lugar en nuestras vidas al dolor de la ausencia, al dolor de aquellos que ya no seremos. Otro acierto de la cinta es el glorioso destino que tiene Bing Bong que, como buen representante de la niñez de Riley, siendo ese compañero imaginario del narcisismo infantil, tiene que desaparecer para permitir el crecimiento.

Comentan los realizadores de la cinta en los audio-comentarios que muchos querían ver de nuevo a Bing Bong pero que decidieron dejar muy claro que cuando te desvaneces se perdió para siempre, ya que asumir la pérdida fue el gran regalo que le da a Riley. De esta forma Bing Bong es un buen objeto transicional a la Winnicott.

Esto nos lleva al climax de la cinta. Alegría y Tristeza vuelven al cuartel general justo en el momento que Riley está a punto de partir en un autobús lejos de sus padres. Las otras emociones le piden a Alegría que resuelva la situación.

“Alegría se dio la vuelta y miró a Tristeza –“Tristeza, todo depende de ti” –dijo.
-“¡¿Qué?! ¿Tristeza?” –los demás dijeron al unísono…
-“No… no puedo Alegría” –respondió
Alegría empujó a Tristeza hacia la consola. – “Riley te necesita” –agregó…
En el autobús la expresión de Riley cambió de ser indiferente a estar triste. De pronto se levantó…”

Finalmente, Riley vuleve con sus padres y con ayuda de Tristeza puede llorar y decirle a sus padres que extraña su antiguo hogar.

“Sé que necesitan que esté feliz, pero yo quiero a mis viejos amigos, a mi equipo de hockey… quiero regresar a casa. Por favor, no se enojen”.

Sus padres la consuelan y se abrazan mientras Riley seguí sollozando.

“La emociones miraban la pantalla, cuando Riley sonrió en medio de las lágrimas y sus padres la abrazaron muy fuerte… De pronto, un ¡RING!... un nuevo pensamiento central se generaba. Este era el primero que era azul y dorado al mismo tiempo.” Disney & Docter, Op. Cit. Págs 150-151

Agradezco a los cineastas de Pixar esta escena sobre todo como padre en estos tiempos. Me gusta la forma como reaccionan tanto el papá como la mamá que escuchan y consuelan a su hija hablando de lo que ellos mismos extrañan y aun así no terminar volviendo a Minessotta. También se agradece la divertida escena donde vemos las emociones de papá y mamá, ya que permite la reflexión sobre ellos también. De inicio, una crítica a través de estos clishés de nuestras sociedades machistas donde la emoción líder de mamá es Tristeza y en Papá es Enojo. Mamá, en su Tristeza es también compasiva y empática, mientras Papá en su Enojo siente que su función es arreglar las cosas y poner orden. Lo divertido es que también se burlan amorosamente de estos clishés donde vemos en Mamá que la compasiva Tristeza alterna con Enojo y añoran al sexy piloto sublime en la comparación con el esposo, mientras que el Enojo de Papá hace equipo todo el tiempo con Miedo que terminan intentado ser firmes para solo hacer el ridículo. Lo amoroso de este cuento familiar es el mensaje para los padres donde se les da lugar también a las carencias y contradicciones en ellos. El mensaje también es la queja que se presenta tristemente como disculpa “Sé que necesitan que esté feliz” que hace que los padres escuchen a su hija más allá de la culpa que genera el verla triste. Docter menciona que la inspiración vino de sus propias preguntas como padre:

“Mi hija que tenía como 11 años, su nombre es Ellie, ella hizo la voz de Ellie niña en UP, era como la niña al inicio de la película que es divertida, corriendo por todos lados como loquilla con el cabello alborotado. Y mi hija era un tanto así de chica. Con forme fue creciendo se fue haciendo más callada y retraída. Yo tuve mis momentos difíciles de niño como en esa edad y entonces la miraba como “Oh, sé por lo que está pasando”; y de ahí fue la inspiración, de preguntarme ¿Qué estará pasando en su cabeza?”

Recordar que las diversas emociones son importantes en el desarrollo y la posibilidad de darles un espacio más allá de ser padres de “calidad” habla de la aventura de la crianza. Terminamos con las frases divertidas con las que concluye la aventura de Alegría:
 
“Pasaron muchas cosas últimamente. Pero aún queremos a nuestra chica. Tiene amigos nuevos, una linda casa. Las cosas no podrían estar mejor. Después de todo, ahora Riley tiene 12 años. ¿Qué podría pasar?” (“Inside Out”. Dir. Pete Docter y Ronnie del Carmen, 2015)

El gag irónico no solo reside en la “ingenuidad” de creer que nada puede pasar cuando se avecina la adolescencia, sino en que remite al prólogo de la película (“Amamos a nuestra niña, después de todo, Riley tiene once ¿Qué puede pasar?”), además de también estar en sintonía con la sensación paterna de cuando ya se está respondiendo a una etapa ya el hijo está por pasar a otra. Por eso planteamos que la historia de IntensaMente le habla principalmente a los padres invitándolos a no angustiarse sobre la “perfecta” vida emocional de sus hijos e intentar ser al menos “suficientemente buenos”.


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