viernes, febrero 06, 2009


La declinación del Edipo a través del mito de Batman
Tercera entrega de 5


Sin duda alguna, “Batman: El caballero de la noche” (The Dark Knight, 2008) se ha convertido en la mejor película de superhéroes incluso llegando a ser considerada por muchos como superando el género de comics para ser apreciada en géneros más serios como el cine negro. Hablando como fan, me parece que debemos mantenerla como una cinta de superhéroes, ubicándola en el bello sendero del mito, la ficción y la fantasía. Me parece que el riesgo es justamente ser dignos de la pregunta del Guasón en el film ¿por qué tan serios? Si tomamos a cada uno de los personajes fuera del contexto mítico perdemos la posibilidad de aquello que el psicoanálisis vislumbra como parte de la cura, encontrar la verdad en la ficción. Podemos parafrasear la encrucijada de The Matrix con respecto a las dos corrientes opciones de comentar esta película de Batman: 1) Tomamos la píldora roja volvemos al engaño de Matrix y creemos que Batman es simplemente una película de personajes de caricaturas para los niños 2) Tomamos la píldora azul y descubrimos la verdad al estilo jungniano, Batman como una película realista con personas que sufren en lugar de personajes clichés y acartonados. Al estilo de Zizek queremos una tercera píldora buscando la verdad pero no en las profundidades de las personas sino en la superficie de los personajes de caricatura.

Apostamos a que lo más importante, donde está lo verdaderamente trascendente del caballero de la noche, no es en el estilo realista sino en lo que se conserva de infantil en el estilo historieta. Para no seguir tan serios buscamos una serie cómica (ya que “Héroes” se pone muy melodramática) y encontramos “The Big Bang Theory” (2007) donde los protagonistas son un ensamble de típicos fans de comics, videojuegos y ciencias exactas. El estereotipo es el del tímido cerebrito que en tiempos lejanos de los 80’s serían los Nerds y que ahora se les reconoce más por Geeks o incluso (en casos más “desadaptados”) Freaks. Los protagonistas son Leonard y Sheldon, jóvenes doctores en física que comparten un departamento al que acaba de llegar como vecina una bella joven que trabaja como mesera. Leonard queda enamorado de ella y decide acercarse ante los sarcasmos de Sheldon que considera inferior a todos los demás. Para completar el cuadro tenemos a Howard y Rajnesh, amigos y compañeros de trabajo. Como toda historia de conjunto, seguimos con la tesis que cada uno encarna una variación del mismo cliché del público objetivo, de la mirada malévola del espectador, aquellos que a los que hace sentido todas las bromas de la serie. ¿Quiénes son ellos? Vayamos a las pistas.

Primero las constantes, cada uno de ellos es un niño genio, fanáticos de los videojuegos, los aparatos electrónicos, los comics, las películas de ciencia ficción y fantasía. Las diferencias, o mejor dicho, las especialidades, ubican a Leonard como el romántico y en el otro extremo de la curva tenemos a su amigo Sheldon como el cínico y egocéntrico, en el extremo de la otra línea tenemos a Howard como el vulgar “Don Juan” que acosa a las mujeres y su opuesto Rajnesh que, tanto le gustan que le asustan, ya que su característica principal es el no poder hablarle a las mujeres.

Tomamos esta serie ya que, entre broma y broma, la verdad que se asoma en la ficción de los fans a los superhéroes, es decir, el público de Batman. Recordamos un episodio en “The Big bang Theory” cuando los cuatro amigos geek son invitados a una fiesta de disfraces por Halloween. Inmediatamente se emocionan ante la idea y preguntan si hay un tema para disfrazarse terminando la escena con un rotundo “¡A las máquinas de coser!”. En la siguiente escena todos se sorprenden al ver que los demás eligieron el mismo disfraz de Flash. ¿Qué nos enseñan estas escenas comic-as? La fascinación de todo fan de superhéroes por los disfraces, por las capas, las capuchas, y la imagen del héroe. De ahí que por más que se quiera racionalizar sobre el por qué The Batman cambia de tipo de disfraz (o incluso por qué tiene que disfrazarse) es una justificación ante el gusto por el disfraz. En “Batman inicia”, vemos algo que antes aparecían en otras historias de superhéroes como flashbacks, el origen del héroe (en el comic original de Batman son unas pocas hojas). Es como si se tuviera que justificar de alguna manera lo que estamos viendo. Esta tendencia a la justificación es el mayor engaño en el que entramos, esa búsqueda de objetividad y legitimización del mito puede encontrar su muerte. Lo que “The Big bang Theory” nos enseña en su humor es lo verdaderamente gozoso, como lo dice Lacan, el “hábito ama al monje”.

¿De donde viene esta justificación exagerada? De nuevo “The Big Bang theory” (teoría que explica el origen del universo, base de muchos contemporáneos de un nuevo de sentimiento religioso científico) nos brinda respuestas. Si vemos el centro de la historia encontramos los intentos románticos de Leonard y como su forma de ser geek le impide acceder a la chica que le gusta. La justificación intelectual será una forma de distancia emocional que sin embargo enaltece la misma emoción. Por decirlo de otra forma, entre más serio intenta ser, más ridículo se presenta. Ese es el riesgo en la película de Batman. Si dejamos de tomarla en serio, no es una película de misterio policíaco ni una tesis sobre el bien y el mal sino una historia de comics, podemos disfrutar la historia además de encontrar algo más interesante. Si los mitos son de antes, ahora y después y reflejan el entramado simbólico que constituye nuestra realidad, es decir, la forma como planteamos la preguntas para entender nuestro mundo, ¿Qué nos dice este Héroe de Dios?

Rescato ciertas frases del guión de los Nolan tomados casi al pie de la letra de diversos comics de Batman. Uno de los prinicplales es en relación con Rachel. En la tesis básica de la historia se supone que Bruce Wayne, apoya a Harvey Dent para ya no tener que ser Batman y así estar junto a su amor imposible. Rachel le dice “cuando te dije que estaría para ti cuando Ciudad Gótica no necesite a Batman lo dije en serio, pero ahora me doy cuenta que tu nunca vas a dejar de necesitar ser Batman”. Es decir, y el que venga de boca de la mujer siempre es totalmente machista, no es que “Bruce sea Batman porque La ciudad lo necesita” sino que “Bruce necesita ser Batman para ser en la ciudad”. En este punto es lo imposible de justificar en el mito del héroe y es su relación diferente con la comunidad.

El punto verdaderamente interesante en la historia es la muerte de la dama en peligro. Ahí es donde Batman se vuelve no una persona real que sufre sino un clásico héroe de comic. No es secreto alguno, los mismos creadores de comics lo saben, el público objetivo de los comics es un adolescente masculino. Desde la idea romántica de que es alguien que esta empezando a ver su potencial, la anécdota del adolescente se vuelve mucho más compleja si la pénsamos en términos de alguien que se encuetra en la transcición de separarse del mundo infantil y ubicarse en el mundo de los adultos en un enfrentamiento a las fantasías infantiles referentes a lo Real en la relación sexual, la función del padre y la mujer.

Esto lo vuelve a dejar más claro la comedia “The Big Bang theory”. Las cuatro variantes de geek, prototipos del público objetivo de los comics, los definimos en relación a formas de acercamiento a la mujer.

En la imagen que utilizamos para enmarcar este escrito vemos a Penny en el centro apoyada en Sheldon y viendo a Leonard que le devuelve la mirada. El slogan dice “Smart is the new sexy” lo que podría traducirse como “Ser inteligente es lo sexy de hoy”. Vemos unas frases escritas que definen a cada personaje. Penny piensa viendo a Leonard “Geeky, but cute” (“Medio Geek, pero lindo”). Leonard piensa de Penny “When I look at you, I can sense you are my density” (“Cuando te veo puedo sentir que eres mi densidad”). Por su parte Sheldon los ve a los dos y piensa “Attraction based on a random grouping of physical characteristics in the absence of quality interacction is doomed to failure” (“Atracción basada en un grupo de características físicas reunidas al azar en ausencia de interacción eficaz está condenada a fallar”). Al estilo de los actores que le preguntan al director sobre la motivación de su personaje, cada frase crea un ente lo que nos recuerda la nominación que le hemos escuchado a Néstor Braustein “el hablente”. El personaje de Penny se define por su carácter de chica linda justamente cuando ve a su vez lo lindo de lo Geek en Leonard que a su vez es definido por una frase que solo los conocedores de la ciencia ficción/fantasía/películas palomeras reconocen. Leonard cita la película “Volver al futuro” donde el personaje del tímido joven padre del pasado intenta, a travéz de los consejos de su hijo que viene del futuro, conquistar a la que será su mujer cuando se equivoca diciendo “density” en lugar de “destiny”. Finalmente, Sheldon analiza la situación amorosa desde la lógica y las fórumlas de la ciencias exactas. Diríamos entonces que en el poster el espectador sabe de lo que trata la serie “Para los amantes de las películas de ciencia ficción, fantasía y que enfretan el romance a través de la lógica para fracasar y hacer el ridículo”. Ingenuamente se puede pensar que esa tendencia de Sheldon (utilizar la lógica y fórmulas exáctas para el análisis de las relaciones amorosas) es privativo de una serie de personas que “tienen problemas”. Nuestra hipótesis es que el que llegue en nuestros tiempos una serie como esta, es decir, que sea chsite actualmente es debido a una tendencia actual en la forma de vvir fenomenos como el romance. De alguna manera la frase del poster es cierta, “Ser listo (pasarse de listo) es lo (sexy) de hoy”.

Como en los ejemplos que brinda el deconstruccionismo (su forma elegante) o la vulgar New Age estilo “el secreto”, la “ley de la atracción” o la escuela de iluminación de Ramta en las películas “¿Y tú que diablos sabes?”, donde cuesta mucho trabajo hablar de la creencia en las religiones o el amor en la pareja y todo es puesto en términos de “adicción bioquímica”, “energías que viajan por conductores como el agua” o “apego a viejas ideiologías que han caducado”. La gracia de Sheldon indica dónde triunfa en lugar de esas historias serias.

Para ejemplo un super-botón. La siguiente escena se le conoce por un título que podemos parafrasear para intepretar nuestra película básica “The Dark knigth”. La escena se le conoce oficialmente como “ciencia de Superman”. Empieza cuando Leonard invita a Penny a ver junto con Sheldon, Howard y Raj un “maratón de películas de Superman”:

Penny: “¡Maratón! ¡Oh! ¿Cuántas películas de Superman hay?”
Sheldon: “¿Bromeas, verdad?”
Penny: “Me gusta en la que Luisa Lane cae de un helicóptero y Superman vuela para atraparla, ¿Cuál es esa?”
Todos: “La 1”
Sheldon: “¿Si te das cuenta que esa escena carece de exactitud científica?”
Penny: “Si, ya sé, los hombres no pueden volar”
Sheldon: “No, no. Asumamos que pueden. Luisa Lane cae acelerando a una velocidad inicial de 30 pies por segundo, Superman vuela para salvarla con sus dos brazos de acero. La señorita Lane ahora a una velocidad aproximada de 120 millas por hora choca con el e inmediatamente es cortada en tres piezas idénticas.
Leonard: “A menos que Superman iguale su velocidad desacelerando antes de agarrarla”
Sheldon “¡¿En qué espacio?! ¡Señor! ¡¿En qué espacio?! Ella está a dos pies del suelo, de hecho, si realmente la amara, dejaría que chocara contra el pavimento, sería una muerte más misericordiosa.
Leonard: ¡Disculpa! Toda tu argumentación se basa en la idea de que Superman es igualmente fuerte como veloz para volar”.
Sheldon: “¡Te escuchas a ti mismo! Está bien establecido que Superman es tan fuerte como veloz para volar como una extensión de sus habilidades de saltar alto y la fuerza que adquiere del sol”.
Howard: “Si, ¿y no tienes problema con eso? ¿Cómo es que vuela de noche?”
Sheldon: Una combinación de reflexión lunar y la capacidad de almacenaje de las células epidérmicas kriptonianas.
Penny: “Mejor me voy a dar un baño”
Leonard: “Tengo ahí dentro 2600 comics ¡Te reto a encontrar una sola referencia sobre las “células epidérmicas krptonianas”!”.
Sheldon: “Reto aceptado”.- Se dirigen al departamento y Sheldon intenta abrir pero la perilla no gira- Se nos cerró la puerta”.

Lo genial de esta escena cómica, además del tiempo y actuación, reside en el centro que sostiene la “discusión”. La fascinación por los comics es la creencia misma. Desde la noción de “asumamos que si pueden volar los hombres” empieza una justificación e intentos de clarificación sin tomar en cuenta que se quedan sin mujer ni apartamento. Lo divertido es justamente lo vulgar de la serie, la autoreferencia, donde la formula básica “es gracioso porque me ha pasado” o incluso “lo chistoso es que de alguna manera lo encuentro chistoso”. Esta forma de analizar a Superman (y Batman) pasa por alto lo infantil, lo comic-o que desata el solo análisis. Ponernos serios es vivir en un mundo de preocupación por la justificación o la prevención. El triunfo innegable de “The Dark Knight” es sostenido en dos pilares. Nos habla en nuestro lenguaje actual (la idea postmoderna de cinismo ante la creencia desplazada, negada o intelectualizada) y por otro lado el gusto por los comics. Afortunadamente sigue siendo caricaturizada cual encuentro de lucha libre como lo veremos más adelante.

2 comentarios:

Daniel Rodrigo dijo...

Perdona lo desordenado de mis comentarios.

¿Los sarcasmos de Sheldon? ¡Sheldon raya en la psicosis! No puede establecer relaciones sociales.
No comprende de sarcasmo hasta los últimos capítulos de la segunda temporada. Vamos, le tienen que
explicar los gestos mas básicos, como los regalos de navidad y esas cosas ("es una convencion social
aceptada")
¿En verdad es egocéntrico?
Me refiero a esto. Pensando "objetivamente", como lo haría un amante de las ciencias exactas, Shledon
no "considera" inferiores a todos los demás, pues él, con si C.I. de 180 y tantos, ES realmente superior
a la mayoría.

Me gustaría poder encontrar tan facilmente ejemplos de lo que leo en los libros en la vida cotidiana.
Me cuesta mucho poder hacer esos enlaces, y desmenuzar una pelicula o serie y tejer esa complicada
tela que es el (psico)análisis del arte. Será en parte, porque me cuesta desprenderme de la emoción o
la pasión (entiéndase lo irracional) que me provoca. Viendo "The big bang theory" hice muchos corajes,
berrinche, etc. cada vez que Leonard cometia alguna tontería con Penny, echandolo todo a perder.¿Como
salirme de esa postura, y tomar una posicion "fría" para poder analizar? Si precisamenete veo las series
y peliculas (y canciones y pinturas) porque me provocan placer, porque me apasionan.

Me gustó mucho el analisis. Me ayuda a ver como es que se habla de psicoanálisis y arte a la vez.

Hector Mendoza dijo...

Estimado Daniel, mil gracias por su comentario al que en su honor, hago algunas precisiones. Considero que hay sarcasmos de Sheldon, lo más gracioso de todo es que el no considera que los son (¿Cómo puede ser esto?) Lo considero así ya desde la etimología de sarcasmo (morder en la pierna), resultan hirientes y divertidos los comentarios de Sheldon, como los de un niño egocentrico (al estilo Piaget). Con respecto a que es superior, difieron totalmente. Es superior en el C.I. pero, tomando una frase de la segunda temporada "¿Cómo le hará el mejorado Hommo novous para ir mañana al trabajo?, ya que esta "muy evolucionado" para manejar". Para terminar, disculpe que insista pero lo sigo exortando a escribir sobre psicoanálisis y rock, aunque la carrera sea de muchos kilometros siempre se empieza por un paso. Saludos